La OR surge formalmente el 15 de mayo de 1970, tras la expulsión de Julio Escalona, Marcos Gómez y Fernando Soto Rojas del FGAJS, estructurado como tendencia marxista-leninista del MIR. Junto a dirigentes y combatientes del FGAJS, la OR se fue conformando con distintos grupos del MIR que actuaban en forma dispersa (Juventud del MIR, ex combatientes del Frente Guerrillero Ezequiel Zamora (FGEZ) y la Célula Camilo Torres en el Oriente de Venezuela). Tanto Bandera Roja como la OR acordaban en la necesidad de mantener la lucha armada y en su definición ideológica como marxistas-leninistas. Diferían, en cambio, en su concepción político-militar. Para los miembros de lo que después se estructuraría como OR la concepción de Betancourt y Puerta Aponte era foquista y repetía los errores que habían llevado al movimiento revolucionario venezolano a una situación de crisis. Por el contrario, la OR se planteó tempranamente una revisión de ese modelo, haciendo especial hincapié en el aislamiento de las organizaciones guerrilleras y en la necesidad de generar estructuras legales o semilegales.
Para el momento de la fundación de la OR, al éxito operativo de los Tupamaros en Uruguay se sumaba la resistencia armada a la dictadura en Brasil y la aparición de grupos guerrilleros en Argentina (Montoneros y ERP) que durante los primeros años de la década alcanzarán un importante desarrollo. En resumen, hablamos de una crisis del modelo del foco guerrillero rural, pero no de la lucha armada como forma de acción política. Ambas situaciones, la revisión del modelo foquista y la necesidad de proseguir la lucha armada, quedarán reflejadas en la base teórica y en las líneas de actuación de la OR en sus primeros años. La OR se definirá en esta primera etapa como una organización transitoria, no hegemónica, e inspirada en el marxismo-leninismo y en la concepción de guerra popular. Así, señalará como sus objetivos inmediatos la recuperación del movimiento revolucionario e insistirá en proseguir la lucha armada para transformarla en una verdadera guerra popular. . Para la OR, lograr este avance sólo era posible resolviendo el problema de los vínculos con las masas y articulando un amplio movimiento de guerrillas que se desarrollase en tres ámbitos: las fábricas, los barrios de las grandes ciudades y en las zonas suburbanas.
En el plano político, la OR defenderá la combinación de las diferentes formas de lucha, postura que se traducirá en su forma organizativa, con la construcción de una vertiente guerrillera, una vertiente política clandestina y una vertiente legal o abierta. Igualmente, en el plano militar transitará de la concepción de columna guerrillera predominante en los 60 al destacamento móvil, vinculado a los centros económicos y aplicando la concentración y desconcentración de fuerzas. En este sentido, el Destacamento Guerrillero José Félix Ribas, organismo militar de la Organización de Revolucionarios, mantuvo grupos de combate en la zona Sur del Lago de Maracaibo, Guayana, Puerto La Cruz y Clarines.
![]() |
Camaradas guerrilleros en selvas venezolanas |
La Organización de Revolucionarios mostrará una capacidad operativa muy limitada que se acentuaría con la detención de los principales dirigentes de la OR en las estructuras del Occidente y el Oriente venezolano. En esta última región, la deserción de Luis Planchart «Manuel», combatiente de la Unidad Cacique Guaicaipuro, provocó que el Ejército estableciera un cerco sobre la zona donde operaba esta estructura. Como consecuencia fueron detenidos dos campesinos vinculados a la OR y apresados los dirigentes David Nieves, identificado por el propio Planchart en Barcelona, y poco después Onofre Valles, en Puerto la Cruz En el Occidente del país, el golpe fue todavía mayor, por cuanto a la deserción de Argenis Rojas «Loyola» o «El llanero», se unió la espantada de un cuadro de dirección de la OR en esta región, Leovigildo Briceño «Benito», cuya colaboración con el Ejército permitió la detención de José Zabala y de buena parte de la dirigencia de la OR en la zona occidental. A estos golpes represivos, se sumaba la detención por el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (SIFA) de Emerio Matos, Luis Guevara Hernández y Julio Ulloa en enero de 1970.
La OR desarrollaria operaciones de propaganda armada, en coordinación con estructuras del PRV-FALN, como la colocación de artefactos explosivos en los Almacenes Caracas en Los Flores de Catia (Caracas), la Fábrica de Mecates de los Dos Caminos (Caracas), los Almacenes Surf-Side, o el Automercado CADA, también en Caracas. Todas ellas acciones en apoyo a conflictos laborales realizadas en marzo 1974. Durante el Gobierno de Rafael Caldera, se amplían las posibilidades de acción legal para las organizaciones políticas de oposición –como el Partido Comunista-, pero se incrementa la conflictividad social, motivada por protestas de carácter socioeconómico y, en menor medida, de demandas políticas, a las que el Ejecutivo responderá incrementando la represión. Para la OR, esta conflictividad social fue interpretada como una oportunidad para el movimiento revolucionario, que debía apartarse de las acciones armadas guerrilleras, sin vinculación con conflictos concretos, y centrar sus esfuerzos en dirigir estos conflictos, buscando politizar la protesta social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario